viernes, 11 de junio de 2010

Lectura rápida




Saber leer, es algo más que juntar letras para articular sonidos, es descodificar y codificar un texto, comprender su significado y recordar la información que hemos captado del mismo.

Al cabo del día recibimos e-mails, faxes, circulares, informes, proyectos, estamos suscritos a periódicos, revistas, blogs; pertenecemos a varias redes sociales y el último best-seller está sobre nuestra mesita de noche.
Nuestros jefes nos piden respuestas rápidas a sus informes.
Hay que dar un servicio ágil a nuestros clientes.
Si tienes “followers” quieres conversar con ellos.

Por otro lado eres ávido de información y de actualidad. Lees los periódicos y las ultimas noticias en Internet. Te gusta seguir unos cuantos blogs, estos blogs referencian a otros que también te interesan y siempre hay algún término que desconoces y que consultas en la Wikipedia…...
Si hicieras el historial de todo lo que llega a tus manos para leer durante el día, te harías cruces.

Las estrategias de lectura rápida son herramientas que nos ayudan a hacer una lectura “inteligente” de nuestros textos.
  
La mejor estrategia es, sin duda, la práctica. Cuando uno quiere o necesita leer mucho con la práctica aprende a adquirir velocidad en la lectura, a sintetizar y a saber extraer el grano de la paja.
He hecho una “lectura rápida” (valga la redundancia) de algunos libros e informes que hablan sobre este tema y os traslado una síntesis de lo que me ha llamado más la atención.
  •  Ante todo hay que tener predisposición a leer el material.
Tener el interés y el propósito de hacerlo. Si se lee con intención de conocer, nuestra actitud nos   predispone a leer con más atención y  rapidez. Si no estamos motivados para esta lectura, nos resultará farragosa, tostón y se nos hará lento y dificultoso comprender el texto.
  •  Determinar con que intención se lee  
Que es lo que se quiere obtener de cualquier material de lectura. No es lo mismo leer un libro de instrucciones para instalar un programa que leer una biografía. Seguramente para instalar el programa no necesitarás saber todos los detalles del manual y podrás saltarte un montón de páginas que hablen de prestaciones que tú no vas a utilizar por el momento.
Si es una circular o norma quizá debas darle solo una ojeada para ver de qué se trata, saber de su existencia y determinar en que contexto es aplicable y dejar como “material a revisar y a leer detenidamente cuando se precise”.
  •  Tomarle las medidas a la estructura del texto
Extensión/Índice/Resumen y conclusiones/Ilustraciones y fotos/Tamaño de la letra/Repartido en secciones/ División de los párrafos…
Todo ello nos dará una idea del tiempo que necesitaremos para leerlo, si se podrá hacer por partes, saltarnos capítulos, si nos será fácilmente comprensible y sobre todo si nos será útil su lectura.
Por tanto no hay que lanzarse a devorar la primera página antes de haber hecho una primera inspección general al conjunto de la obra.
  • Cada tipo de lectura requiere un enfoque diferente.
          El “skimming” y el “scanning” 
Una de las estrategias de lectura es el “skimming” en español “barrida del texto”.
Consiste en un examen superficial del escrito, esto es sin leerlo en detalle, con el fin de obtener una idea general del contenido. Se utiliza para dar una primera ojeada o bien para repasar un texto ya leído.
Cuando vamos a un restaurante y nos ofrecen la carta, hacemos primeramente un “skimming” para ver que platos hay, posteriormente nos centraremos en algunos en particular según nuestras apetencias.
La estrategia "scanning" , en español “búsqueda de información específica”
Se pone en práctica cuando se conoce los datos que se están buscando y no se necesita la información global del texto.
Cuando consultamos un directorio de direcciones y teléfonos, utilizamos “scanning” pues vamos directos al dato que nos interesa, prescindiendo del resto.

  • La importancia del movimiento de los ojos
Cuando leemos movemos los ojos o los ojos y la cabeza. Los ojos son la herramienta de lectura más importante.
El patrón más común es mover los ojos de derecha a izquierda, mirando cada línea de la página. Un lector más rápido puede mover los ojos de modo menos lineal, permitiendo que vayan de un lado al otro del párrafo o barriéndolo en diagonal en vez de mirarlo línea por línea.
Podemos mejorar nuestro patrón de lectura introduciendo pequeños cambios. Intentemos ampliar nuestro campo de visión no centrándonos en cada palabra, si no intentando leer varias palabras y líneas a la vez. Experimentar si en vez de barrer cada línea con la mirada, podemos mirar la página en sentido descendente. O bien si os resulta más fácil mover los ojos zigzagueando de derecha a izquierda. Hay que ir probando, cada uno tendrá su patrón de barrido visual, que le resultará más apropiado.
  • Por último la postura y la posición del libro.
Aparte de que hay que buscar el estado y la situación apropiada para leer, también es importante la posición del libro. Muchas personas observan que les resulta naturalmente más fácil ver la letra impresa, cuando el libro se encuentra al nivel de los ojos o por encima. Quizá también os resulte más fácil leer un texto en la pantalla del ordenador que sobre vuestro escritorio.

Se dice que utilizando estos métodos se puede duplicar la velocidad de lectura sin pérdida significativa de comprensión, al contrario hay personas que descubren que su comprensión mejora tanto como su velocidad.


Este post lo he escrito un poco egoístamente. He querido daros pautas para que leáis mi blogmás y mejor”, entre otras cosas......

Que tengáis un buen día.
Montse



Referencias: Aprendizaje Dinámico con PNL de Robert B.Dilts y Todd A Epstein

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lunes, 7 de junio de 2010

Desconectar




Cuando hablamos de “ser productivo” casi siempre nos referimos a serlo en el ámbito profesional, dejando al libre albedrío el resto de facetas de nuestra vida: familia, amigos, formación, ocio, etc.

En realidad “ser productivo” conlleva serlo en todos los ámbitos, serlo en esencia, como algo inherente a nosotros.

Si consiguiéramos este estado “puro” de productividad, no importaría si estuviéramos trabajando, en familia, con amigos o de vacaciones. En todos los casos optimizaríamos al máximo nuestros recursos disponibles, para obtener el mejor resultado en nuestros proyectos.

Lo malo es que, rara vez, estamos plenamente concentrados y vivimos con plena intensidad la tarea que estamos realizando. Las emociones, preocupaciones e interrupciones interfieren en nuestra actividad. Realizamos una tarea, pero no hemos podido desconectar de otra, hay algo pendiente, algo que nos disgusta, que anhelamos o que nos preocupa y entonces no ponemos los cinco sentidos en lo que estamos haciendo.

Sólo cuando experimentamos “flujo” en la tarea que hacemos, se logra un enfoque total de la atención en el presente.

Un ejemplo de “experiencia de flujo” sería la que vive un alpinista cuando está escalando: se olvida y no es consciente de otras situaciones problemáticas de su vida y su único mundo es la pared por la que asciende.

Aprender a desconectar de este “ruido” interno o externo que se interfiere en nuestra concentración, es el camino para maximizar nuestra productividad.

Algunas recomendaciones:

-Mantener el equilibrio en la dedicación de tiempo al trabajo, a la familia, formación, ocio, etc.…
-Filtrar y evitar interrupciones.
-Intercalar intervalos de descanso.
-Apagar el móvil y pasarse a 1.0 cuando una tarea requiera toda la atención.
-Hacer deporte o caminar de forma sistemática.
-Practicar técnicas de respiración y/o de relajación para paliar el estrés.
-Utilizar algún método de productividad para tener unas pautas a seguir.
-Distinguir lo “urgente” de lo “importante”.

Y sobre todo “disfrutar”, intentar como el alpinista fluir y “disfrutar” de la pared que estés escalando en cada momento. Es la mejor forma de “desconectar” del resto.

Que tengáis un buen día.
Montse


Referencia: Fluir de Mihaly Csikszentmihalyi

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miércoles, 2 de junio de 2010

El tiempo y su relatividad




La fascinación por definir y medir el tiempo vienen desde el inicio de la historia. En un principio, se comenzaron a estudiar los movimientos de los astros, especialmente el movimiento aparente del Sol. Hoy medimos el tiempo mediante relojes atómicos Éstos están calibrados para contar 9,192,631,770 vibraciones del átomo del Cesium para luego hacer un "tic". El UTC (Tiempo universal coordinado), referente de las zonas horarias, se establece según estos relojes atómicos. Debido a que la rotación de la Tierra es estable, pero no constante, el tiempo universal se retrasa con respecto al tiempo atómico. UTC se sincroniza con el día y la noche del tiempo universal, añadiendo o quitando un "segundo intercalar" tanto a finales de junio como de diciembre, cuando resulta necesario.

Todo sincronizado hasta la milésima de segundo y seguimos sin poder definir exactamente el tiempo y la eternidad.

El tiempo no se palpa, huye, a veces se extiende y otras se acorta. Hemos podido medir el tiempo objetivo, pero no su percepción.

El “valor” del tiempo no varía según las estaciones ni según los años del calendario, sino según la edad y la percepción subjetiva que de él vamos adquiriendo.

Por un lado somos espectadores del curso de las cosas y percibimos el tiempo como una corriente que viene a nuestro encuentro. Del futuro al presente para disolverse inmediatamente en el pasado.
Por otro lado somos actores y el tiempo nos lleva como un impulso dinámico de atrás hacia adelante, a realizar nuestro proyecto personal hacia el futuro.

Podemos decir que el presente es, al mismo tiempo, línea de llegada de información y línea de partida de energía.

El tiempo simplemente pasa. Es un goteo de segundos uno tras otro que, hasta la fecha, nadie ha podido detener. Nosotros solo podemos gestionarlo, optimizarlo, administrarlo y utilizarlo para llevar a cabo nuestro proyecto de vida.

Para ello es importante tomar conciencia del auténtico valor de nuestro tiempo.

Algunos “ladrones de tiempo”, podrían ser:

- Indefinición de metas y objetivos.
- Confusión con las prioridades.
- Hábitos arraigados de procrastinación.
- Falta de organización.
- Multitasking
- Ausencia o fallos en los procedimientos.
- Demasiado perfeccionista.
- Falta de autodisciplina.
- Desperdiciar energía en banalidades sin valor añadido.
-
Como decía Heráclito “Todo fluye y es imposible bañarse dos veces en el mismo rio”.

Sumérgete, bien en el río de la vida, no te mojes solo los pies en  la orilla.

Que tengáis un buen día.
Montse


Referencias: Cómo organizar su trabajo de Deusto
                    Wikipedia, enciclopedia libre 



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viernes, 28 de mayo de 2010

Quítate las piedras del zapato





Con frecuencia sentimos malestar por pequeñas cosas que soportamos en nuestra vida cotidiana y que nos resultan fastidiosas. Nimiedades en medio del camino, con las que topamos frecuentemente. Pequeños obstáculos, que tienes que esquivar, que están ahí, como piedrecillas en los zapatos; te molestan, pero sigues andando, más lento, con algo de dolor, pero sigues y todo ello por no pararte, sentarte un momento y quitártelas.
¡Ah!!! ¡Que alivio cuando lo haces!!!

Esa infinidad de cosas que toleras te absorben energía, te malhumoran y perjudican tu productividad.

Algunos ejemplos podrían ser:

-Tu archivador se quedó pequeño hace algún tiempo. Lo tienes atiborrado. No cabe nada más. Para sacar  una carpeta tienes que hacer un esfuerzo y luego ya no puedes volverla a meter. Ya tienes fuera un montoncito de carpetas, a la espera de un archivador nuevo. Cada vez que tienes que buscar algo sientes un verdadero fastidio.

-A tu mejor camisa se le cayó un botón, ahí está a la espera de que alguien se lo cosa. Ya has ido a un par de citas en las que te hubiera gustado lucirla, pero no te daba tiempo. Te has plantado otra cosa, pero has ido un poco a disgusto.

-Se te ha estropeado el interruptor del despacho. Hay que darle repetidas veces para que se encienda la luz. Llevas así un mes, cada vez que lo utilizas sufres pensando ¿Funcionará? Encontrar un lampista con urgencia es difícil. ¿Amas el riesgo, verdad?

-Recibes en tu correo diario sesenta “power-points” de tus amigos. Son paisajes, flores, música, consejos para prevenir atracos y bacterias; les das una ojeadita por si entre ellos hay algo importante. Pierdes mucho tiempo pero te sabe mal mandar un correo a todos y decirles que “por favor no te envíen más” .Y así resistes día a día, repasando y borrando e-mails.

Empieza por apuntar que es lo que te molesta, obstaculiza o te hace perder tiempo.

Haz una lista y mantenla abierta para tachar lo resuelto y añadir nuevas “molestias”
Te sorprenderás de las cosas que te fastidian.

-Ves haciendo huecos en tu agenda para ocuparte de reparaciones, compras y tareas.
-Aprovecha por tirar lo que no sirve y te está obstaculizando el camino.
-A menos que seas muy manitas solicita la ayuda de un profesional para las reparaciones o  pequeñas  instalaciones. Te evitarás mucho desgaste de energía y posibles desastres.
-Aprende a decir NO a situaciones que te resulten fastidiosas y sean evitables.

Intenta eliminar “las piedrecillas que tengas cuanto antes e impide que se te instalen de nuevas. No lo pospongas, evitarás que te salgan ampollas.

Que tengáis un buen día.
Montse

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martes, 25 de mayo de 2010

Enseñar a pescar



"Regala un pescado a un hombre y le darás alimento para un día, enséñale a pescar y lo alimentarás para el resto de su vida" (Proverbio chino)

Al contrario de lo que muchos creen no accedemos a la mayoría de nuestros aprendizajes básicos a través del estudio y del esfuerzo. Más bien son el resultado de una forma natural de aprender a través de la experiencia. Cuando aprendemos a ir en bicicleta, lo más probable es que después de varios intentos y caídas, mejoremos progresivamente hasta mantener solos el equilibrio, avanzar y detenernos. Una vez aprendido ya no se olvida y ya forma parte inherente de nuestro ser.

Formar no es sólo transferir conocimiento, sino despertar inquietudes y habilidades.
Cuando nacemos nuestro cerebro no es una página en blanco, sino un enorme potencial de posibilidades que pueden llegar a realizarse o no.
“Aprender a aprender” es la mejor herramienta para desarrollar este potencial.

El aprendizaje estático consiste en la adquisición de conocimiento, perspectivas, métodos y reglas fijas para tratar situaciones fijas y recurrentes. Realza nuestra capacidad de resolución de problemas dados. Este tipo de aprendizaje está diseñado para mantener un sistema o un modo de vida ya establecido y es indispensable para el funcionamiento y la estabilidad de la sociedad.

Sin embargo, para la supervivencia y el desarrollo es esencial otro tipo de aprendizaje: el que puede producir cambio, renovación y reformulación de problemas. Se trata del aprendizaje dinámico. “Aprender a aprender" implica saber analizar y organizar la información disponible y cuestionar su utilidad.

El aprendizaje estático evalúa la adquisición de conocimientos en una materia o habilidad, aplicando acción correctora para paliar los fallos y debilidades percibidos. No contempla construir nuevas oportunidades ni expectativas. Por el contrario, el aprendizaje dinámico se centra en la preparación para la acción en nuevas situaciones. Trata problemas “emergentes” que pueden ser únicos y por tanto no hay oportunidad de aprender por ensayo y error. Problemas para los cuales no se conocen soluciones.

El desarrollo del “empowerment”, la creatividad y la participación son pilares básicos que cualquier organización debe tener en cuenta si desea construir un equipo capaz de hacer frente a nuevos retos y cambios.

Formar personas con capacidad para compartir responsabilidades, trabajar en equipo, tomar iniciativas, abiertas a nuevas perspectivas, sin miedo al cambio. Eso es………”Enseñar a pescar”

Que tengáis un buen día
Montse


Referencia: Aprendizaje Dinámico con PNL de Robert B.Dilts y Todd A.Epstein
                 Líderes de Warren Bennis y Burt Nanus

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lunes, 17 de mayo de 2010

Archivar en transparente



"Archivar rápido. Encontrar rápido."

Este debería ser el lema de un buen sistema de archivo.

¿Por qué procrastinamos tanto a la hora de archivar? ¿Por qué lo hacemos lento y complicado.?

Si necesitamos más de un minuto entre que decidimos que un elemento de nuestra bandeja de entrada lo queremos conservar hasta que lo archivamos en su sitio definitivo, es que no estamos usando un buen método. Peor aún, si posteriormente queremos recuperar este elemento y debemos poner todo patas arriba para encontrarlo. ¿Dónde lo has metido?

Yo he simplificado mucho mi sistema, gracias a la transparencia.

Me he aprovisionado de dossiers transparentes, en los que se ve el contenido. También de unas etiquetas que se pegan y despegan, con lo cual puedes reciclar nuevamente las carpetas cuando tiras el contenido actual.

También tengo cajas, bolsas y sobres transparentes. Cada uno tiene su utilidad.

Ver lo que hay dentro ahorra mucho tiempo. Simultáneamente lees la etiqueta y ves el interior. En las carpetas opacas, aunque las elijas de distintos colores, a primera vista todas son iguales, debes leer una a una las etiquetas para buscar la que te interesa y posteriormente abrir la tapa. Un derroche.

En mi maleta, mis zapatos en bolsa transparente, mi cargador de móvil, mis cremas y champús. No tengo que ir abriendo cada bolsa para ver que he metido dentro.

En la cocina, el azúcar, la sal, el arroz, en botes de cristal. Es fácil ver lo que hace falta comprar.

Film transparente para guardar restos en la nevera. Bolsas para congelar.

Un sinfín de posibilidades. Transparentar está de moda. Impleméntalo en tu archivo.

Que tengáis un buen día.
Montse

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viernes, 14 de mayo de 2010

La persuasión y sus leyes




La Persuasión es el arte de inducir a otros a que cambien de actitud, que adopten una idea, o que realicen una acción que nos interesa. Todo ello de forma voluntaria, por convencimiento. Hay que diferenciarla de la negociación que conduce a llegar a un punto medio de entendimiento.

Para persuadir a los demás de que hagan lo que uno quiere, se utilizan técnicas basadas en las leyes de la persuasión.

Estas leyes no son buenas ni malas, simplemente existen. Depende de cómo y con que fines se usen. Pueden ser utilizadas sin escrúpulos para obtener poder y lucro, pero también para llegar a acuerdos de paz, alianzas entre Estados, convencer del uso de medidas preventivas de salud, normas de civismo y de seguridad.
Son utilizadas también , por gente muy especializada, para negociar con secuestradores o para disuadir a un suicida que atente contra su vida o la de otros.

Las campañas de marketing y publicidad están basadas principalmente en la persuasión y siguen sus leyes, adoptando unas u otras según interese, para influir más y mejor en su público objetivo.

Unas cuantas leyes:

Ley de la Reciprocidad:

Cuando los demás hacen algo por nosotros, nos sentimos agradecidos y con la necesidad, incluso la presión, de devolverles el favor.
La técnica de ofrecer un obsequio, un elogio o incluso solamente una sonrisa, funciona.
Si un amigo te invita a una reunión de “Tupperware” en su casa, te da un regalito, te ofrece un refresco y te comes sus galletas, es casi seguro que elegirás del catálogo algún producto  para no irte de su casa sin comprar nada.
También es casi seguro que irás a comprar a la tienda en la que te han ofrecido gratuitamente muestras de sus productos y en los que te tratan de forma más amable.
La técnica de ofrecer un obsequio, un elogio o una sonrisa, funciona.
Pero esta ley es muy sutil y puede volverse en contra si puede percibirse que se utiliza como un soborno o coacción. En este caso la persona se siente incómoda y rehuye el compromiso.
Sólo funciona si la obligación que se crea se percibe como un acto desinteresado.

Ley del compromiso y la consistencia:

Una vez la gente se compromete a llevar a cabo lo que ha decidido que es correcto, ya sea de forma oral o por escrito, es probable que siga comprometido, incluso después de que los términos y las condiciones cambien. Por ejemplo, en la venta de coches, si de repente, en el último momento, el vendedor eleva el precio del coche, el comprador, que ya ha decidido comprar, sigue adelante con su decisión.

Cuando más públicos se hacen los compromisos adquiridos más fácil es que estos se mantengan firmes. Adoptar una postura o decisión delante de otras personas nos obliga más a suscribir este compromiso. De ahí que por ejemplo, en los centros de adelgazamiento inviten a sus clientes a hacer partícipes a familiares y amigos de su decisión de perder peso, si lo has dicho públicamente es un poco más difícil que te eches atrás.

Ley de la validación social:

 La gente hará aquellas cosas que vea que otra gente hace a su alrededor. Tomamos el comportamiento de los demás como referente para nuestras acciones, para validar lo que deberíamos o no deberíamos hacer.
Generalmente, nos permitimos chillar y gritar en un partido de fútbol, porque la multitud lo hace o levantamos la cabeza instintivamente mirando al cielo si vemos que las personas de alrededor nuestro alzan la vista.
Hay también un lado oscuro en esta ley:” la apatía del espectador pasivo”.Cuando ocurre un accidente, cuantas más personas están presentes, se reduce el número de los que ayudan de verdad, pues el sentido de responsabilidad se diluye.

Ley de autoridad :

La gente tenderá a obedecer a figuras de autoridad, incluso si les piden realizar actos que les resulten desagradables.

Ley de la conectividad:

 La gente es convencida fácilmente por otra gente con quien se siente a gusto. De forma natural intentamos agradar a las personas que nos gustan o nos atraen en algún sentido. Si gustas a tu público, te perdonarán tus errores y recordarán tus aciertos. La gente compra más a gusto si les complace la persona que les está vendiendo el producto.

También es cierto el principio de similitud. Nos suele gustar y nos solemos sentir más atraídos por personas parecidas a nosotros o con algún rasgo social o interés común. En consecuencia los que quieran que accedamos a sus deseos pueden conseguirlo pareciendo similares a nosotros.

Ley de la escasez :

Tiene un amplio papel en el proceso de persuasión. Las oportunidades siempre son más valiosas y emocionantes cuando son escasas y están menos disponibles. Cuanto más escaso sea un bien más aumenta su valor y más urgente nos parecerá poseerlo.
Rótulos que rezan “Ofertas del día”, “Hasta agotar existencias”, “Ofertas exclusivas” “Liquidación por cierre”, funcionan porque hacen que la gente piense que perderá la oportunidad si no actúa de inmediato.

Ley de la asociación:

Nuestro cerebro relaciona objetos, gestos y símbolos con nuestros sentimientos, recuerdos y experiencias. Nos asociamos mentalmente con frases, imágenes, sonidos, colores, música y símbolos.

El olfato:
Este sentido es tan potente que puede activar muy rápido asociaciones con recuerdos y emociones. Para algunos el olor a pan recién hecho, el del césped recién cortado o el del cloro de la piscina nos puede hacer retroceder veinte años y evocar momentos nostálgicos en pocos segundos. El olor puede mejorar o reforzar las respuestas deseadas. Los supermercados con panaderías llenan el aire con el aroma cálido de pan y café. Tiendas de pastas y galletas se aseguran que se huela a bollos de canela. Los agentes inmobiliarios aconsejan que el propietario de una casa en venta, ahuyente los malos olores y ponga pan en el horno antes de que lleguen los posibles compradores.

La música:
Gimnasios y discotecas que ponen música animada desde el exterior para insinuar que dentro hay energía elevada y diversión. Tiendas de ropa, restaurantes, centros comerciales con música acorde al estilo del público objetivo.
La música puede amansar a las fieras o crear energía y excitación al instante.

El color :
Es un dispositivo de persuasión fantástico. El color es crítico en marketing, en publicidad y en los envoltorios de los productos. No es algo meramente relacionado con la apariencia, sino que tiene significado.
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Los restaurantes de comida rápida decoran sus locales en rojo, amarillo o naranja que son colores excitantes que estimulan el apetito y animan a comer más deprisa. Compara esos colores vivos con los colores tranquilizadores que usan los restaurantes selectos, en especial verdes y azules que animan a quedarse allí y comer sin prisas.

El color incluso mejora el sabor y el atractivo de la comida.
Se prefiere un zumo de naranja de color muy vivo a uno del color naranja más natural. Un café servido en taza roja se aprecia como “rico y aromático”, el mismo café servido en taza amarilla “demasiado flojo” y el servido en taza marrón “demasiado fuerte”.

Curiosas leyes.

Que tengáis un buen día.
Montse


Referencia: El arte de influir en los demás de Kurt W.Mortensen


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