El éxito de una empresa dependerá principalmente de cómo trabaje su gente.
Muchos líderes gestionan su equipo "controlando y mandando". Vigilan atentamente todo lo que sucede y toman la mayoría de decisiones importantes. Es la forma tradicional de dirección. No obstante actualmente es inadecuado y difícil mantener este estilo. Hoy las empresas necesitan ser dinámicas para ser competitivas y este dinamismo se consigue con una mejora continuada, delegación de tareas, formación de equipos y promoviendo la creatividad y la participación.
Es un cambio radical en el estilo de dirección y el líder más que nunca ha de conseguir que su equipo lo acepte y lo siga como tal.
El líder será aquel que sepa potenciar lo mejor de cada uno de los colaboradores, le ayude a desarrollar sus capacidades y muy especialmente consiga entusiasmarle con el proyecto u objetivo que se quiera alcanzar.
Hablar de motivar a los demás no es del todo correcto, porque siempre es uno mismo quien se motiva y decide si se pone o no se pone en acción y esto sucede cuando confluyen factores motivadores.
Por ello es mejor hablar de “crear un clima motivador”.
¿Cómo se logra crear este clima? ¿Qué cualidades debe tener un buen líder? ¿Cómo consigue que le sigan?
Actualmente para las organizaciones, el factor más importante para conseguir ser competitivas es su gente, su motivación y compromiso con la empresa. La falta de motivación o el descontento incidirán negativamente en la forma de tratar a los clientes y en la obtención de resultados mediocres.
Algunas cualidades del buen líder:
1.- Ser un modelo a imitar
La gente presta más atención a lo que alguien hace, que a lo que ese alguien le dice que haga. Los directivos tienen que practicar en su comportamiento diario lo que predican. Ser un modelo implica que la manera de hacer de uno tiene una enorme influencia en la manera de hacer de los demás. Por tanto esta característica abarca todas las cualidades que debe poseer un líder.
2.-Conocerse a sí mismo
Ha de reconocer sus debilidades para intentar paliarlas y potenciar sus puntos fuertes. No puede dirigir eficazmente a los demás si no ha aprendido a dirigirse y controlarse a sí mismo.
3.-Ser aprendiz
Estar abiertos siempre a aprender y desarrollarse. Muchos líderes creen que deben fingir que lo saben todo para no perder prestigio. Precisamente ésta es una parte esencial del modelo que predican, la apertura a nuevos sistemas, la innovación y la creatividad son la base para el desarrollo de cualquier organización actual y los líderes son los primeros que deberán apuntarse a “aprender” continuadamente.
4.- Disposición a los cambios
El líder eficaz trabaja inmerso en el cambio en vez de resistirse a él. Quizás el cambio será la única constante en el futuro y el líder debe aceptar como un reto el trabajar en continuo avance y aprendizaje.
5.-Tener visión
El buen líder tiene una visión clara de lo que puede y quiere conseguir la organización y la transmite. No se trata de mejoras incrementales sino de saltos hacia adelante en la práctica, los procesos y las posibilidades. Necesita para ello emplear la lógica, la imaginación y la inspiración. Los buenos líderes tienen ideales para el futuro; estos ideales ayudan a desarrollar una dinámica de progreso y mejora hacia el objetivo.
6.-Ser consciente de la realidad presente
Para dirigirse hacia el ideal se ha de tener muy claro dónde se está situado en el presente. Reconocer los puntos débiles de un proceso, las dificultades y los medios de que se dispone, han de servir para producir un desarrollo activo. La tensión que se genera y que redefiniremos como la energía que nos impulsa fuera de la “zona de confort” hacia una zona desconocida para lograr hacer realidad la visión, se llama “Tensión creativa”, definida así por Peter Senge. En ningún caso es provechoso considerar esta tensión como un motivo para rebajar los objetivos, pues esto llevaría a una regresión en lugar de un progreso.
7.-Tener una escala de valores
Rasgos como la “integridad” y la “ética” son valores que el grupo percibe como muy importantes a la hora de considerar a un líder.
8.-Utilizar el pensamiento sistémico
El pensamiento sistémico implica ser consciente de cómo funcionan los procesos y separar las causas de los síntomas. Deming decía que los problemas laborales eran debidos a los sistemas, no a la gente. Según Senge: La característica que define a un sistema es que no puede ser entendida como una función de sus componentes aislados. El comportamiento del sistema no depende de lo que cada parte está haciendo, sino de la manera en que cada parte se relaciona con el resto. Con este enfoque se logra estudiar el sistema de organización en si mismo, aparte de las personas que lo constituyen y permite obtener una perspectiva a más largo plazo.
9.-Ser buen comunicador
Ser capaz de transmitir clara y congruentemente un mensaje. Expresarse de forma nítida y sencilla, de forma que los demás puedan comprender que se les dice y que se espera de ellos.
10.-Pensar positivamente
Ver las posibilidades, afrontar los problemas como retos, tener una visión positiva de las cosas y buen sentido del humor ayudan a mantenerse centrado en los objetivos, a pesar de las dificultades.
11.-Ser entusiasta
Es una cualidad contagiosa que atrae a los demás y ayuda a soportar situaciones complicadas y a seguir confiando en lograr el éxito en lo propuesto.
12.-Ser inteligente
En realidad las anteriores cualidades pueden ser trabajadas y desarrolladas, son habilidades que todo líder debe intentar implementar para ser eficaz, pero ésta última se refiere a ser jefe de personas. Ahí es dónde juega su papel la Inteligencia Emocional; la capacidad de comprender a los demás; saber qué los motiva, cómo operan, cómo relacionarse adecuadamente con el grupo, reconocer y reaccionar ante el humor, el temperamento y las emociones de los otros, es el catalizador que propicia sacar lo mejor de cada miembro del equipo e impulsarle a la acción.
Que tengáis un buen día.
Montse
Fuente referencia: Marcando las Diferencias de Di Kamp (Edit. Gestión 2000)
Otros artículos que te pueden gustar:
El "alma" del grupo
Mediocres. Los más abundantes
Me ha parecido muy interesante. Muchas veces el sentido común es el menos común de todos los sentidos y en este caso nos has dejado un repertorio de las claves que tenemos que tener todos.
ResponderEliminarYo personalmente creo que un líder, ademas de esas cualidades, tiene que tener a seguidores y estos también tienen que tener y esforzarse por trabajar estas cualidades. A partir de esta premisa, si creo que el seguidor se convierte en líder si ayuda y enseña a este.
Por lo tanto como has titulado tu post, siguiendo a un líder con las cualidades que mencionas es, en mi modesta opinión, más fácil de lograrlo que un líder que depende de terceras personas para que funcione.
Felicidades por el articulo,
ResponderEliminarAcabo de darme cuenta de que mis jefes no cumplen ni una de las cualidades
@samuray de la ejecución:
ResponderEliminarEfectivamente samuray, por eso creo que las doce cualidades podrían resumirse en dos.La primera y la última.
Muchas gracias por tu aportación y espero nos visites más veces. Saludos.
Montse
@Anónimo:
ResponderEliminar¡Vaya! Lamento haberte abierto los ojos. Quizás si les recomiendas que lean mi blog.... aprenden.(:-D)
Muchas gracias por tu comentario, pásate más veces. Saludos.
Montse
Al buen líder, lo siguen los buenos seguidores. Creo que deberiamos fijarnos más en las cualidades de los seguidores, tan olvidados como los tenemos.
ResponderEliminarhttp://alex-elusodesimismo.blogspot.com/search/label/Liderazgo
@Alex García García:
ResponderEliminarSin duda unos se retroalimentan de los otros.
En otro post hablaré de las cualidades de los buenos seguidores.
Muchas gracias por tu aportación y espero te animes a comentar más veces. Saludos.Montse
Por una avería general de Blogger esta entrada se despublicó y se perdieron los comentarios que había en ella.Lamento lo ocurrido y os invito a que comentéis de nuevo. ¡Gracias!
ResponderEliminarMuchos líderes gestionan su equipo "controlando y mandando". Vigilan atentamente todo lo que sucede y toman la mayoría de decisiones importantes. Es la forma tradicional de dirección. No obstante actualmente es inadecuado y difícil mantener este estilo. Hoy lo seguimos viviendo a diario. Con respecto a la creacion de equipos de trabajo, no es tan facil lograrlo como decirlo. En contados casos te encontras con la idea de "Ustedes tienen que formar un buen equipo de trabajo" sintiendo que te delegan la responsabilidad y a solucionalo. Dificil de decir y de explicar en vos alta sin riesgos, a buen entendedor sobran los ejemplos.
ResponderEliminarNo significa bajar los brazos, pero estamos en un momento dificil de como se siente desde abajo la intencion de ejemplos de liderazgos, se puede y seguro que se puede, pero debe existir la intencion explicita de entender la diferencia de DIALOGO y COMUNICACION.
1.- Ser un modelo a imitar
Hoy casi todos miran lo que otros hacen, pero como saber con que intencion lo comentan?. No lo digo con inseguridad personal, aunque podria ser un ejemplo ni bueno ni malo.
2.-Conocerse a sí mismo
Es fundamental, pero que espejo utilizaria uno como para compararse y definirse en relacion a si puede o no ser lider. Cuando alguien pertenece a un grupo o equipo existen intencionalidades externas a uno mismo.
En los puntos siguientes, es logico y entendible desde la idea de la mejora permanente, pero en el siguiente uno puede tener un pensamiento, pero podemos expresarlo tanto en palabras como con los echos?.
Ser positivo entusiasta y comunicador, creo en ejercicios permanentes con predisposicion de ambos lados.
La gran duda, ser inteligentes con relacion a lo emotivo, espectacular, pero desde la posicion de jerarquia perfecto pero desde la de equipo de trabajo, como estar seguro de que es o hasta donde ser inteligente, siempre para lograr ser un LIDER.
Espero se entienda que son dudas y no criticas a este articulo que creo en lo personal que es muy pero muy bueno.
@Elizondo carlos: Cierto. No es tan fácil lograrlo como decirlo. Formar un buen equipo es algo en sí difícil, pues los humanos a diferencia de las máquinas, aparte de nuestros conocimientos y aptitudes profesionales, gozamos de un gran abanico de emociones y éstas son complicadas de gestionar. Un equipo puede considerarse "una unidad de trabajo" que está viva y que sufre cambios constantemente. Solo que un miembro varíe su actitud, se incorpore o salga del grupo influencia al resto. Los líderes deberían ser maestros en gestionar las emociones y muchas veces no es el "jefe titular" el que logra motivar o empujar al grupo en situaciones difíciles, sino otro miembro con menos responsabilidad jerárquica pero con más mano izquierda para crear un buen clima de trabajo.
EliminarTe puede interesar el artículo que menciono al final del post "el alma del grupo"
Te agradezco mucho tu amplio comentario. Cuestionarse las cosas es el mejor modo de hallar respuestas.
Saludos
Muy buenas todas las cualidades. Mi opinión tener una visión clara, y ocuparse de cada uno de los miembros de su equipo, colocándose en los zapatos de ellos, nunca olvidando sus responsabilidades.
ResponderEliminar